El Diseño de motocicletas, no hay sido siempre cosa de americanos. Y para aquellos que no les guste el estilo deportivo de las Triumph ahora pueden alucinar con una moto de chasis estilo chopper en una marca europea. BMW ha restaurado un antiguo prototipo perdido durante la II Guerra Mundial, la R-7.
Este es el trabajo del ingeniero Alfred Böning en 1930. Una maravilla de la ingeniería en el apogeo del Art Decó que rompe con todos los esquemas habidos sobre como crear una moto, con un resultado alucinante. Desde los decorados guardabarros hasta el amplio uso de cromo y acero, estas elegantes líneas son algo merecedor de verse circulando por las calles.
(La luz trasera estructuralmente integrada al guardabarros trasero iluminaba la palabra stop, al frenar).
El innovador de la R-7 diseño situaba el deposito escondido tras la cubierta exterior, El indicador de aceite sobre la cubierta cromada superior y en la mano derecha, el cambio de marchas suicida con forma de “H” que permitía un cambió más limpio como en un coche, algo anteriormente nunca hecho. Con un motor boxer de 800cc que parecía una pieza maciza, las bielas estaban montadas sobre cojinetes lisos, el árbol de levas puesto bajo el cigüeñal permitía que los taqués se situaban bajo los cilindros, mejorando la posición de las válvulas y las bujías. Aparte por primera vez, horquilla delantera telescópica. Todo ello permitía ser al R-7 una moto de altas prestaciones.
(La horquilla delantera era telescópica y el indicador de velocidad estaba integrado a la estructura del faro)
Aunque incluía una lista de innovaciones, que hasta la década de los setenta no hemos llegado a ver en motos, jamás se ha fabricado en serie la R-7. Esto es debido a su alto coste de producción y el elevado peso de la estructura, algo no muy deseable en una motocicleta. Además poco tardo en llegar la guerra y con BMW en el bando alemán, se desecho la idea de fabricarlo y el prototipo fue almacenado por piezas.
Sin embargo en el 2005, BMW inició un ardua trabajo para traer de nuevo a la vida esta maravilla. Tras más de 60 años las piezas estaban casi todas en perfecto estado, sin embargo se tuvieron que restaurar varias e incluso reconstruir algunas como el cambio de 4 posiciones o la transmisión y repintar la moto. Con ello tras más de 70 años la R-7 volvió a correr y ahora nos deja esta impresionante muestra del diseño de la ingeniería en la época del Art Decó, que podemos admirar en el museo de BMW Classic.
Damos las Gracias al Sr. Marrón por colaborar con nosotros con un artículo tan completo e interesante, que nos ayuda a romper con la monotonía del verano, GRACIAS!!
Hombre, de nada. Gracias a vosotros por publicar algo como resultado de mi aburrimiento en verano.
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